En las dos últimas semanas hemos
celebrado el Orgullo LGTBIQ en nuestra Región:
sábado 17 en Murcia, sábado 24 en Cartagena.
Son varios los asuntos que nos
llevan a reflexionar sobre cuanto ha acontecido.
Hemos vivido excitación e infinita alegría porque estamos ahí, celebrando la vida, celebrando el amor en libertad, reivindicando el avance hacia la plenitud de derechos y libertades… Hemos visto familias, niños y ancianos, todos y todas comprometidos por una causa: la igualdad.
Hemos sentido enfado y rebeldía,
porque un grupo de personas fascistas, irrespetuosas con las libertades, violentas
e ignorantes, atacaron la manifestación de quienes solo deseamos vivir en paz y
en derechos.
Hemos sentido también incredulidad,
porque un alto cargo político, ni más ni menos que el Delegado de Gobierno,
asume con naturalidad que tienen la misma cabida en la misma ciudad un grupo de
cientos de personas que celebran la vida y un grupo de unas docenas de personas
trastornadas por una ideología de carácter nazi tratando de boicotearla. Afirmando, sin pudor, que todo es correcto,
que no hay nada de inverosimilitud ni estupidez en todo ello.
La alegría se nos ha mezclado con
una vieja inquietud: para algunas personas que forman parte de los medios de
comunicación, el Orgullo LGTBIQ sigue siendo Orgullo Gay. ¿Falta información, falta concienciación, falta
educación en diversidad? Las lesbianas,
los y las transexuales y todo el abanico de diversidades queda silenciado y
oculto en una sola palabra: gay, que hace referencia a hombres. Si los medios de comunicación aún no han
tomado conciencia de este abuso del lenguaje, que invisibiliza al resto del
colectivo, en algo no estamos haciendo suficiente presión.
Conformismo. Conformismo porque en las fiestas tras las
manifestaciones las mujeres apenas están presentes como artistas invitadas. El
show es gay y para gais. Y nosotras lo asumimos como algo normalizado.
Y por último, finalizada la
fiesta cartagenera, nos ha llegado la consternación: dos nuevos asesinatos
machistas sacuden las noticias, colándose en nuestras conciencias.
No podemos pararnos a sentir que
está todo hecho, ni siquiera a disfrutar de una alegre resaca…
Somos mujeres lesbianas y
bisexuales. El Orgullo también es femenino y lesbiano.
El Derecho no es una
frivolidad. Y nuestros gobernantes no pueden actuar irresponsablemente con
total impunidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario